Apostillas a la tercera jornada del viaje del Papa a Canadá
54 kilómetros cuadrados de agua bendita
Esta noche pronunciará su único (y esperado) discurso político-institucional en el país
El Papa llega a Quebec, 'allá donde el río se estrecha', segunda etapa de su 'peregrinaje penitencial' a Canadá
Francisco reivindica, desde Canadá, el "mestizaje de la diversidad" entre los creyentes
El Papa apuesta por la Iglesia como "sede de un inaudito anuncio de fraternidad, de una revolución sin muertos ni heridos, la del amor"
Andrea Monda hace balance de la primera etapa del viaje de Francisco en Edmonton
El drama que ocurrió en los internados de Canadá: un cortocircuito trágico y sin sentido
Durante su visita al lago Santa Ana
Francisco bendijo una escultura de la Virgen Desatanudos para los indígenas
Un santo para cada día: 28 de julio
S. Pedro Poveda (Pedagogo, fundador y mártir de nuestro tiempo)
Mt 13 47-53 EVANGELIO EN AUDIO
Esta parábola es semejante a la de ayer sobre el trigo y la cizaña que crecen juntos. Aquí se trata de peces y en ambos casos es la invitación a todos, buenos y malos, a participar del reino, aunque la clave está en cómo se vive.
A Dios, el día del juicio, corresponde hacer la separación entre unos y otros. Jesús nos ofrece la posibilidad de participar de una vida plena.
El reino de los cielos es un regalo valioso que se nos ha ofrecido y merece por lo mismo una respuesta de acogida. Por esta razón el evangelio termina recordando la importancia de fomentar la virtud del discernimiento para saber lo que hay de valor y lo que hay de inútil en nuestra vida. También podríamos aplicarlo a la misma Palabra donde el Antiguo como el Nuevo Testamento nos ofrecen su sabiduría y es importante primero entenderlo y segundo aplicarlo.
¿Eres de los que dice: ¡Señor, Señor! pero no cumples la voluntad de tu Padre que está en los cielos?
Comentarios
Publicar un comentario