Se realizó en colaboración con el Dicasterio de Comunicación y el del Servicio al Desarrollo
Estreno de 'La Carta', un innovador documental sobre Francisco y la protección del clima y la naturaleza
Entrevista al presidente de los obispos argentinos en el segundo aniversario de la 'encíclica de la pandemia'
Óscar Ojea: "Fratelli Tutti es la culminación del magisterio de Francisco en la pandemia"
"La economía de Francisco y Clara, inspirada en el Cántico de las Criaturas, está llegando y nosotros nos unimos a ella"
¡San Francisco, compañero de Santa Clara!
Enfermedad, muerte y voluntad de Dios
José María Marín: "Dios no quiere la enfermedad para nadie, ni la envía, ni mucho menos premia o castiga con ella"
Santa Faustina Kowalska
Memoria Del latín. patronímico de Faustus "próspero", "feliz" (1905-1938). Religiosa de las Hermanas de la Bienaventurada Virgen María de la Misericordia. Nace en Glogowiec, Polonia. En 1924 en una visión, Nuestro Señor le invita a ingresar en el convento de Varsovia.
En 1925, se afilia a la Congregación de las Hermanas de la Bienaventurada Virgen María de la Misericordia, dedicadas al auxilio de niñas pobres y abandonadas, ahí adopta el nombre de Faustina. Durante su noviciado (1926) inicia su periodo de experiencias místicas. Realiza humildes tareas en diversos conventos.
En 1931 inician las apariciones del Señor de la Misericordia, quien le indica propague su veneración; por esto se le conoce como "Apóstol de la Divina Misericordia". Además de las manifestaciones de Jesús, tuvo el privilegio de ver a la Virgen María, así relata esta visión: "en la fiesta de la Inmaculada Concepción vi a la santísima Madre de Dios, bella con belleza incomparable".
Muere víctima de la tuberculosis en la Casa Generalicia de su Orden en Lagiewniki (Cracovia). Fue canonizada por san Juan Pablo II (1978-2005; 22 de octubre) en el año 2000.
En su diario dejó plasmadas bellas reflexiones, como la siguiente: "Debes mostrar misericordia al prójimo siempre y en todas partes. No puedes dejar de hacerlo ni excusarte ni justificarte. Te doy tres formas de ejercer misericordia al prójimo: la primera, la acción; la segunda, la palabra; la tercera, la oración. En estas tres formas está contenida la plenitud de la misericordia y es el testimonio irrefutable del amor hacia Mí".
A nosotros nos resulta común referirnos a Dios como Padre, porque así nos lo transmitieron por generaciones y así lo seguimos asumiendo. Sin embargo, para la gente de su época era difícil y escandaloso concebir una relación tan personal con Dios.
La oración del “Padre nuestro” es una oración de íntima confianza, amor y seguridad hacia Dios que sostiene nuestra vida. Pero al mismo tiempo, es un compromiso llamarlo Padre porque nos hace hermanos y hermanas más allá de religiones, raza o diversidad cultural.
El mito de la raza, la religión, la riqueza y el poder nos ha hecho creer que no todos tenemos igual dignidad y derechos. Nos recuerda el Papa Francisco: “Cuidar el mundo que nos rodea y contiene es cuidarnos a nosotros mismos. Pero necesitamos constituirnos en un nosotros que habita la casa común” (Fratelli Tutti 17).
Este día podríamos buscar un espacio tranquilo para orar y meditar el “Padre nuestro”, dejando que cada una de sus expresiones encuentren resonancia en nuestra vida y nuestras relaciones.
Cuba: "Este modelo no es soportable"
El clamor de este pueblo nuestro
Por Sor Nadieska Almeida*, superiora de las Hijas de la Caridad en CubaEl Papa recuerda a los Oblatos que "los pobres enseñan el camino de la esperanza"
El 'drama' de la Iglesia, según Francisco: "Cuando los ministros de la Iglesia abandonan a los pobres”
Entra hoy en vigor, festividad de San Francisco de Asís
El Vaticano se suma al Acuerdo del Clima de París: emisiones cero en 2050
Con el patrocinio de la Santa Sede y la organización de la CEE y el Arzobispado de Santiago de Compostela, sede oficial de las jornadas
Comentarios
Publicar un comentario